Saludemos Este Día Con Amor En Nuestros Corazones

Saludemos este día con amor en nuestros corazones. Porque éste es el secreto más grande del éxito en todo lo que emprendemos. Pues sólo el poder invisible del amor puede abrir el corazón del hombre, y hasta que no dominemos este arte no seremos mas que seres sin vida, caminando como zombies en el mundo. Hagamos del amor nuestra arma mas poderosa y nadie a quien visitemos podrá defenderse de su fuerza. 

Podrán contradecir nuestro razonamiento, podrán desconfiar de nuestros discursos, podrán desaprobar nuestra manera de vestir; podrán rechazar nuestro rostro; y hasta podrán sospechar de nuestra buena voluntad; y sin embargo el amor que profesemos  les derretirá el corazón.

¿Y cómo lo haremos? De aquí en adelante contemplemos todas las cosas con amor y naceremos de nuevo. Amaremos al sol porque nos calienta los huesos; pero también amaremos la lluvia porque purifica nuestro espíritu. Amaremos la luz porque nos señala el camino; pero también amaremos la oscuridad porque nos enseña las estrellas. Acogeremos la felicidad porque engrandece nuestro corazón; pero también soportaremos la tristeza porque descubre nuestra alma. Reconoceremos la recompensa porque constituye nuestro pago; pero también daré acogida a los obstáculos porque constituyen para nosotros un desafió. 

Elogiemos a nuestros enemigos y así se convertirán en amigos nuestros. Animemos a nuestros amigos y se convertirán en nuestros hermanos. Ahondemos siempre en razones para elogiar; cuando sintamos tentación de criticar mordamonos la lengua. 

Amemos a todas las clases de hombres porque cada uno tiene cualidades dignas de ser admiradas, aunque quizá estén ocultas. Amemos a los que tienen ambiciones porque podrán inspirarnos; amemos a los que han fracasado porque pueden enseñarnos. Amemos a los reyes por ser humanos, amemos a los humildes porque son divinos, amemos a los ricos porque viven en soledad, amemos a los pobres porque son demasiados. Amemos a los jóvenes por la fe a la que se aferran; amemos a los ancianos por la sabiduría que comparten. Amaremos a los hermosos por sus ojos de tristeza; y amemos a los feos por sus almas saturadas de paz.

Sin importar la conducta de los demás siempre reaccionemos con amor en nuestros corazones. Porque también como el amor es nuestra mejor arma, es también nuestro mejor escudo. Recordemos siempre que la adversidad y el desánimo azotaran nuestra vida como una serie de huracanes, pero con este nuevo escudo los veremos reducidos a simple lluvia de manantial. 

Hoy procuremos hablar sin palabras, dejemos que nuestros ojos reflejen el amor que sentimos, y asi aunque la adversidad sea muy grande podremos serenar nuestra frente, y veremos como una sonrisa se asoma en nuestro rostro.